sábado, 29 de marzo de 2014

¿Qué estará pensando mi bebé?

Superbebé quiere decir más cosas:

En este periodo brillante río y río y no me canso. No paro de mover todas esas partes de mí alargadas, mis manitas no paran, ya no sé como hacer para moverme todo más rápido. ¡¡¡No puedo parar !!! eeeeeeeeeeeeeee eeeeeeeeeeeeee eeeeeeeeeeeeeeee (¡ese sonido sí que me sale bien!).

Y sigo y sigo eeeee eeeee eeeeee, moviendome sin parar y veo que los grandes, mis dos preferidos, ¡¡¡están ahí conmigo !!!! Me miran y se ríen mucho, no paran, ríen y ríen y yo igual. ¡¡Que biennnn !!
¡¡Este periodo brillante me encanta!!!

Me gustan más los periodos brillantes que los periodos oscuros, en los que no hago nada, se me cierran los ojos (¡sí eso también lo he aprendido ! Pues todos los grandes dicen : ¡qué ojos!) y paso así todo el periodo oscuro hasta que aparece el brillo y vuelvo a ver a los grandes y a ver todo.

Este periodo brillante es genial, tengo a mis dos grandes preferidos conmigo, tocándome, acariciándome y jugando conmigo y yo me muevo y no puedo parar.

Es que no sé porque en otros periodos de brillo abro los ojos y mis dos grandes preferidos no están...empiezo a buscarlos y no están ahí, están los otros grandes que últimamente me gustan mucho también, pero mis dos preferidos no están...

Pero sigue el periodo de brillo y luego vuelvo a ver a mis dos preferidos y sonrío de inmediato para demostrarles que me encantan y que los necesito.Sé que si hago eso ellos también me lo devolverán...

Ellos siempre están en los periodos oscuros, pero como se me cierran los ojos, no los veo.


Pero hoy es especial,  es un periodo de brillo y los veo a los dos.  

Por eso reímos y nos movemos todos contentos 

jueves, 20 de marzo de 2014

La importancia de cantarle a mi bebé:


Cuando estaba embarazada leía acerca de la importancia de la música y el cantarle a nuestro hijo.

Leí que era muy importante cantarle o recitarle poesías procurando que fueran siempre las mismas, para que él desde dentro del útero ya fuera recordando la melodía o las palabras.

Pues según algunos estudios los bebés que habían escuchado una melodía determinada intraútero si la escuchaban tras nacer, sonreían al escuchar la misma melodía.

Cuando estaba embarazada tocaba el piano y siempre tocaba el vals de Amelie para luego tocarle cuando fuera un bebé.

Por ahora sólo le he tocado la obra una o dos veces y si que parece gustarle pero todavía no puedo contar claramente si funciona o no esta técnica porque no lo he probado más.

Lo que sí que funciona, o al menos a mi, y sobre ello es lo que quería escribir en este post, es el cantarle al bebé. Cantarle en general le gusta y muchas veces me sonríe cuando lo hago.

¡Pero estoy impresionada del poder de una nana !

Desde bien pequeñito siempre le canto la misma nana, es una nana que me cantaba mi padre a mí y que no tiene una letra determinada, pero yo me he inventado una muy sencilla y muy tonta.

El caso es que cuando era más pequeñito se la cantaba y no estaba segura de si le gustaba o no, tenía tan pocos mesecitos que todavía no expresaba sus emociones de forma tan clara para nosotros como lo hace ahora.

Pero poco a poco, esta melodía fue quedándose en su memoria y más adelante a los 4 meses cuando hicimos un largo viaje a Francia a casa de mis suegros, en el coche es lo que más le calmaba y conseguía dormirlo.

Tengo que decir que mi bebé no es de los que se duermen solitos en su cuna sin ningún balanceo.

Pero ahora cuando le entra sueño, empiezo a cantarle la nana y él nada más que comienzo me sonríe y gira la cabecita de lado (en posicion de dormir) y con un suave balanceo en su hamaquita ¡se duerme en un momento !

Es cierto que no siempre siempre me funciona, pero si tiene sueño y está tranquilo funciona al instante. Claro si tiene sueño pero está nervioso o hay mucha gente alrededor no se duerme.

Por eso es muy importante para los bebés un ambiente relajado y diferente al diurno en la hora de acostarlo en la noche.

Parece una tontería pero a mi me llena de orgullo que hayamos encontrado esta otra forma de comunicación y cariño.

Este es otro vínculo creado entre él y yo. Y la manera en que me sonríe cuando empiezo a cantarle me emociona y me llena de alegría.

Me siento como si tuvieramos nuestro pequeño secreto él y yo y como si me entendiera mejor que cualquier otro adulto. Esa sonrisa de mi angelito es la mejor sonrisa que pueda ver.


Verlo a él cada día me llena de felicidad y cada vez que me sonríe va llenando de felicidad mi corazón. 
Estoy sentimental. Acabo de empezar la vuelta al trabajo y echo de menos a mi niño!!!


jueves, 13 de marzo de 2014

¿Qué estará pensando mi bebé?

Superbebé tiene algo que decir:

Ya hace mucho que he venido a este mundo nuevo y difícil de comprender.
En mi mundo de antes* estaba muy bien. Era un mundo acogedor y no tenía que hacer nada.

Aquí tengo que esforzarme, incluso sudar para poder chupar con fuerza esa parte que me da eso tan rico y que huele tan bien.
Tengo que esforzarme porque a veces tengo algo pegajoso que me molesta para hacer eso del aire que entra en mi nariz, hincha mi cuerpito y me hace sentir tan bien.
¡Tengo que esforzarme por todo eso y muuucho más !
En mi mundo de antes no me costaba moverme, aquí tengo que hacer fuerza.

Pero yo estoy muy contento de estar en este mundo. ¡Me encanta este mundo !

Pero lo que más esfuerzo me supone es comprender a esos tan grandes que tengo a mi alrededor.
Yo los miro y los busco continuamente. Sobretodo a esa grande que huele tan bien* que estaba en mi mundo de antes siempre y ahora a veces no está.
También me gusta mucho el otro grande, que es el más grande y que juega conmigo muchas veces aunque no tiene eso que huele tan bien.
Esos dos, son mis preferidos. Luego hay otros grandes diferentes que me miran mucho y me hablan raro que aún entiendo menos, pero me interesan.

Yo intento comprenderles a ellos y quiero que me comprendan, les oigo todo el tiempo, emiten sonidos por el mismo sitio que yo, pero diferentes. Sus sonidos tienen un orden, aunque la que huele tan bien tiene unos sonidos muy diferentes a los del más grande.
El más grande emite sonidos diferentes a los que escucho siempre en este mundo*.
Yo como no se hacer los mismos sonidos, me esfuerzo y me esfuerzo pero aún no consigo imitarlos, pues hago otras cosas.
Me muevo enérgicamente, todas esas partes de mi más alargadas se mueven un montón ! Mis manitas, (ya he descubierto su nombre, pues empiezo a entender esos sonidos aunque no sé imitarlos) me encantan. Las muevo mucho y lo toco todo.

Y lo que más hago, es reír y sonreír, porque me encanta y veo que a los grandes les encanta. Cuando hago eso están conmigo todo el rato. Así que como funciona yo lo hago siempre !

*Interpretando al superbebé:

-mi mundo de antes: la barriga
-la que huele tan bien: mi mamá (en relación a la leche materna)
-sonidos diferentes a los que escucho siempre en este mundo (se refiere a otra lengua distinta a la de España).

lunes, 10 de marzo de 2014

Mi bebé siempre quiere estar en brazos


¿Es esto lo que te ocurre ?

Si es así,¡bienvenida al club !

Cuando mi bebé tenía apenas un mes demandaba mucho estar en brazos, suerte para mí que no pesaba demasiado, pues ahora tengo las muñecas con múltiples dolores y eso que es un niño no muy pesado.

Quería estar al brazo todo el tiempo y cuando digo todo el tiempo es ¡todo el tiempo 24x7 !

Para ponerlo en la cuna tenía que mecerlo hasta que se dormía.

Yo procuraba dejarlo cuando estaba casi casi dormido pero aún un poquito consciente de su alrededor para que se acabara durmiendo sólo, pero aún así siempre nos necesita para dormir.

De hecho aún para dormir tenemos que mecerlo, cantarle, mimarle, etc y tiene casi 6 meses ya.

El caso es que esta necesidad de contacto con nosotros, no se le pasaba al cumplir 2 meses...hasta más tarde que ya en la hamaquita empezaba a estar contento de poder ver todo a su alrededor desde otra perspectiva, (no acostado en la cuna como para dormir).

Pero claro, tiene 6 meses y ahora ya no está tanto al brazo, aunque sigue gustándole mucho que lo cojamos.

La mayoría de nosotr@s nos preguntamos : ¿Debo cojer a mi bebé en brazos siempre que me lo pide ?, ¿no lo estaré malacostumbrando ? ¿Seré un/a padre/madre consentidor/a ?

Pues bien, yo como siempre, os doy mi opinión y mi experiencia, y digo que, sobretodo en esta etapa, que son bebés, si quieren brazos, ¡pues brazos !

Nosotros así lo hemos hecho y no puedo hablar del futuro porque mi bebé tiene 5 meses y casi 4 semanas y no sé que va a hacer de más mayorcito.

Pero sí que puedo decir, lo que pienso, lo que siento, lo que he leído en diversos artículos y lo que nos han aconsejado algún que otro profesional, como por ejemplo, la encantadora matrona que vino a nuestro domicilio para darnos ciertos consejos básicos.

La historia, es que un bebé es un ¡bebé ! Y diréis, ¡que tontería de frase ! Pues puede parecerlo, pero para mí es una frase muy importante y potente.

Porque un bebé es lo más bonito que hay en el mundo sobretodo si es nuestro hijo/a. Con ello quiero decir, que para mí, hay que cuidarlo como tal y mimarlo así.

Tan sólo con 2 meses según creemos no se malacostumbra, y si lo hiciera, ¡pues allá con las consecuencias ! Nosotros decidimos que no queríamos ver a nuestro bebé llorar y menos cuando se trataba de esa edad y asumimos las consecuencias.

Como ya he dicho no puedo hablar de un futuro más lejano, pero así es como vemos las cosas y seguimos cogiéndolo cuando nos lo pide.

Y como ya he contado antes, ahora no quiere estar siempre en brazos, de hecho si lo está todo el rato se agobia. (Pues mis suegros cuando lo ven, ¡lo tienen todo el rato así !) y el pobre se cansa.

Con que, y con esto voy acabando el post, si un@ siente que desea cojer a su hij@ al brazo y no verlo llorar, yo os digo que ¡adelante ! Y que nos dejemos de habladurías populares... y mimemos y criemos a nuestros hijos con el mayor amor que sepamos darle.

Ya sé que muchos pensáis diferente y que también le dais el mayor amor posible. Lo respeto y estoy segura que cada padre y madre hace lo que cree que es lo mejor para su hij@.

A parte de nuestra decisión de hacerlo como ya he contado. Yo he leído que el hecho de no dejar llorar al bebé, le da confianza y refuerza su autoestima.






sábado, 1 de marzo de 2014

Continuación parto: Desarrollo parto, oxitocina y epidural.

Aunque yo tuve contracciones desde 2 meses aproximadamente antes del parto, éstas eran esporádicas y no dolorosas.


Si bien, las últimas semanas eran más continuadas y más dolorosas, cuando me puse de parto me di cuenta de que las anteriores contracciones no eran nada comparadas con las del parto.

Con lo que tras haberlo vivido me di cuenta de que todos mis dudas, muy normales, y mi “manía” de no enterarme si rompía aguas, se habían quedado en el olvido, ya que se suele dar de esta manera y una se entera de inmediato (normalmente).

Estaba contenta y emocionada porque iba a ver a mi hijo en cuestión de 24 horas, pero a la vez, preocupada con las mil cuestiones que vienen a la cabeza y con que todo saliera bien.

Yo quería por todos los medios tener un parto vaginal y que fuera lo más natural posible por lo que no tenía claro si usar la epidural.

Contaré que rompí aguas a la 1 de la madrugada y me pasé toda la noche sin dormir con contracciones parte en mi casa y parte ya en el hospital hasta que llegó la matrona a las 7 de la mañana y me bajó junto a mi marido a la sala de dilatación.

Allí te monitorean para ver que las contracciones son más regulares (exactamente al mismo intervalo de tiempo) y cada vez se producen a intervalos de tiempo menores. Yo me pase toda la noche dilatando con contracciones cada 5 minutos pero no se me acortaban los tiempos.

Con lo que la matrona me puso oxitocina, tal como ocurre en los partos provocados, para que las contracciones fueran más repetidas. Me puso muy poca oxitocina ya que yo tenía 3 o 4 cm ya dilatados.

Esto es lo que hay que tener para que empiece la etapa activa del parto. Y hasta los 10 cm aproximadamente no se empieza el trabajo de parto. (Creo recordar que era así).

En mi caso una vez me pusieron la oxitocina aguanté 2 horas (desde las 7 hasta las 9 de la mañana aproximadamente )sin la epidural, pero finalmente a esas horas y después de estar toda la noche aguantando dolores y sin dormir decidí pedirla.

Ahora escribiré sobre mi percepción del dolor de la forma más descriptiva posible, con lo que si eres de las que te da miedo lo que se pueda sentir y no quieres ni pensarlo hasta que llegue, no sigas leyendo.

Pues bien sobre las preguntas que una se hace, respecto a que tipo de dolor se siente, en mi caso yo tenía un dolor “¡para morirme!”. Parece ser, que tuve un parto de riñones (que se dice popularmente) y es que me dolía muchísimo en la parte de la espalda cerca de los riñones.

La sensación es que te estás abriendo literalmente por dentro y que los huesos se desencajan y como que te están tirando de la barriga y la pelvis hacia abajo.

No sé como describirlo porque no se parece a ningún tipo de dolor que yo haya tenido anteriormente.

Me gusta escribirlo lo más descriptivo que puedo porque a mi me hubiera gustado que me lo hubieran contado así.

Pero entiendo que haya gente que prefiera no escucharlo ni leerlo y ni siquiera pensarlo y que cuando llegue llega.

Quiero contar lo que sentí al ponerme la epidural, porque ahora que lo he vivido me ha cambiado la forma de verlo.

Yo no estaba segura de ponérmela principalmente porque su uso provoca que una no sienta del todo la fuerza que se hace al hacer los pujos de parto.

Y también porque quería saber que tolerancia tengo al dolor, mi aguante y si sería lo suficientemente valiente para soportarlo y porque en este tipo de cosas me gusta lo más natural. Pero esto ni siquiera eran razones, sólo pensamientos que se me pasaban por la cabeza.

Como digo lo principal era que me asustaba no saber bien la fuerza que tenía que hacer y por tanto fuese más complicado parir.

Bien pues tras ponérmela, estuve muy contenta de la decisión.
Por un lado ya se me habían acabado los dolores brutales, aunque aún seguía con molestias (¡yo creo que es imposible no notar nada de molestias aún usando la epidural!).

Por otro lado el proceso de salida del bebe fue muy relajado y el útero hizo todo su trabajo solito y bien.

Si no me hubiese puesto la epidural, hubiera estado más nerviosa debido a los fuertes dolores y podría haberme posicionado en posturas menos convenientes para que el útero hiciera su trabajo.

De hecho ya lo había hecho antes de que llegara la matrona. Me puse en posiciones menos dolorosas pero cuando ella llego me movió las piernas y me dijo que no me moviera que así (como más dolor sentía) era mejor para que fuera bajando el bebé.

Justo antes de entrar al paritorio la matrona le dijo a mi marido que pusiera la punta del dedo en el canal de parto porque ¡ ya se podía notar la cabeza!

Esto me animó mucho, porque claro, si la cabeza ya estaba ahí era cuestión de empujar un poco y fuera. Por lo menos así lo veía yo y ¡así fue!

Entramos al paritorio y en menos de media hora ya tenía a mi recién nacido en mis brazos.

Respecto al tema de la fuerza. Es cierto que yo no notaba bien la fuerza que hacía porque toda la zona estaba muy dormida. La fuerza que se hace es como cuando uno hace caca. Pero hay que hacer esta fuerza lo más fuerte que se haya hecho nunca.

Yo así lo hice y más todavía porque al no notar la presión que hacía, pensé que mejor hacer la fuerza más potente de mi vida (eso tenía en mi cabeza mientras empujaba) y que así saliera mi bebe pronto. ¡Y a los 3 ó 4 empujones ya estaba fuera!

Con que ví que usar la epidural, al menos en mi caso no me dificultó el parto, si no, lo contrario.

Eso sí no hay que olvidar que hay posibles complicaciones por su uso y posibles efectos secundarios, mucha gente tiene miedo a ponérsela por esto. Eso es personal y decisión de cada una.

Somos muy afortunados por lo bien que fue todo y por tener a nuestro pequeño tan bien.

Todo el dolor anteriormente descrito, todas las dudas y preocupaciones se me fueron en el instante que me dieron a mi pequeño piel con piel.

Esto sí me lo habían dicho todas las mamás con las que había hablado, que se te olvida todo al segundo. Y es totalmente cierto.

Yo creo que puede ayudar, el pensar eso en el proceso del parto. Porque yo me acuerdo que pensaba: -y dicen que se olvidan los dolores ¡ja pues lo veo difícil!, -¡¿cuánto más durará?! ¡¿cuánto falta?!

Y al segundo de tener a mi bebé en los brazos, ¡Adiós a todo lo anterior!